En esta ocasión, hablamos sobre el dolor y la impotencia que nos produce cada feminicidio. El feminicidio evidencia la desigualdad de género, la discriminación, la misoginia y el odio que le arrebata la vida miles de mujeres y cuerpos feminizados cada año. Por eso, hacemos el llamado a desnaturalizar las violencias contra nosotras y reiteramos nuestra consigna: "de noche o de día, desnudas o vestidas, en la calle o en la casa; que respeten nuestras vidas".